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Experiences in
Brazil- Venezuela- Mexico
El monte Roraima es un "Tepuy" (montaña en lengua indígena pemón); una montaña de cima horizontal ubicada en una de las formaciones geológicas más antiguas del planeta, con unos 3.600 millones de años.
Su punto más alto se llama “Pedra Maverick”, que alcanza los 2.810 metros sobre el nivel del mar y se llama así porque desde lejos (durante la caminata) se puede ver su silueta idéntica a la de este auto. Algunos incluso lo llaman "El Carro". Roraima es el hito geográfico que demarca las fronteras entre Venezuela, Brasil y Guyana.
Esta masa precámbrica se divide entre Venezuela (85%); Guayana (10%) y Brasil (5%). Este lugar, venerado por los indígenas Pemón; es una alegoría de la génesis de la humanidad, cuna de ríos y formaciones rocosas que desafían la imaginación. Visitar esta maravilla de la naturaleza es como entrar en un mundo prehistórico; un mundo "perdido en el tiempo", donde su biología endémica y sus cuevas nos recuerdan lo pequeños que somos en el mundo comparados con estos monumentos milenarios, testigos de la formación de nuestro planeta.
Contenido:
Geología
Geomorfología de un Tepuy
Flora
Fauna
GEOLOGIA
La Formación Geológica de Roraima, ya era antigua cuando los dos continentes: América del Sur y África estaban conectados como parte del supercontinente llamado "Gondwana".
A partir de mediciones de intrusiones datables de diabasa ígnea en tepuyes como el Monte Roraima y otros, los geólogos pudieron determinar que la arena depositada aquí fue el resultado de una cadena montañosa erosionada, esparcida por la lluvia y el viento sobre el Escudo Guayanés, hace más 1,8 mil millones de años.
La erosión eólica del pasado, así como la meteorización superficial que actuó en las cimas de los tepuyes, ahora nos permite ver cómo las capas de sedimentos de arena y ceniza volcánica se depositaron en el fondo de algunos lagos (Marcas Onduladas) y deltas que se formaron en el Proterozoico; es decir, antes de que aparecieran organismos complejos en los mares.
Hay evidencia de que no ha habido vida en esta formaciones, debido a que no se han encontrado fósiles atrapados entre estos estratos. Estas capas de sedimentos dieron origen a las capas de areniscas y jaspes que componen los tepuyes y que se acumularon a lo largo de unos 200 millones de años, alcanzando un espesor que rondaría los 7.000 metros, pero que ahora se eleva a entre 700 y 1.500 metros sobre el Guayana. Escudo que forman la roca ígnea de abajo. Estos gigantes precámbricos son producto de la erosión durante miles de millones de años, con estratos de areniscas que no han sufrido deformación tectónica y que han experimentado un proceso geológico llamado isostasia, lo que explica por qué son tan altos. Nuestros guías están listos para llevarte a este Mundo Perdido y explicarte sobre este tema y muchos más de estos monumentos naturales.
Misteriosas formaciones rocosas
Piedra "Tortuga", es un Yardang o roca erosionada por el viento
Estratos sedimentarios perfectamente horizontales (capas)
Estratos sedimentarios perfectamente horizontales (capas)
Existencia de marcas onduladas, evidencia de fondos de lagos antiguos
Las Marmitas son agujeros producidos por erosión mecánica (cuarzo) y conocidos como Jacuzis
GEOMORFOLOGÍA DE UN TEPUY
Un tepuy es una elevación que alcanza casi 3 kilómetros de altura, que tiene, generalmente, forma de mesa; se compone de roca arenisca, con paredes escarpadas, con estratos horizontales cuya formación es una de las más antiguas del mundo y con biología endémica. No es una montaña, ya que no se formó por procesos orogénicos; se forma por erosión.
ELEMENTOS GEOMORFOLÓGICOS DE UN TEPUY:
1. Piedemonte (abanicos aluviales)
2. Base del tepuy
3. Paredes ecarpadas
4. Zona de borde
5. Superficie del Tepuy
5
4
3
2
1.
Stegolepis guianensis
Brochinnia tatei
Bonnetia roraimae
Beffaria imthurmi
Epidendrum secundum
Tipo de Helecho no identificado
FLORA
Las plantas de la cumbre del Roraima se aferran precariamente a la vida en profundas grietas y hendiduras en la superficie rocosa erosionada; es decir, allí la poca tierra que hay puede escapar de ser arrastrada por las fuertes lluvias.
En las áreas expuestas, se amontonan pequeños cojines de plantas endémicas, que se asemejan a jardines japoneses en miniatura. Hay tantas plantas con flores hermosas y atractivas: casi todas son exclusivas de los tepuyes, y más de la mitad se conocen sólo de Roraima.
La cumbre del Roraima es un entorno difícil para cualquier organismo vivo. La roca madre tiene un bajo contenido mineral, por lo que los suelos son pobres en nutrientes (especialmente fósforo, calcio y nitrógeno). La turba orgánica altamente ácida, que consiste principalmente en materia en descomposición, descansa directamente sobre el lecho rocoso de la cumbre del tepuy.
El agua de lluvia filtra rápidamente cualquier nutriente y las inundaciones erosionan continuamente los suelos. Algunas plantas tuvieron que encontrar una manera de complementar su dieta, capturando y digiriendo pequeños animales "plantas carnívoras"; la mayoría tuvo que desarrollar estrategias para combatir la pérdida de agua y anclarse efectivamente en un sustrato inadecuado.
Los animales deben sobrevivir en un entorno con suministros de alimentos limitados y lidiar con extremos de radiación y temperatura.
En las fotos alugunos ejemplares de la flora endémica encontradas en los tepuyes. En las fotos, ejemplos de la flora endémica que se encuentra en los tepuyes.
FAUNA
El explorador Im Thurn no había informado de ninguna vida animal en la cima del monte Roraima, pero en lo profundo de los densos grupos de vegetación, los pequeños mamíferos cavan madrigueras y las criaturas más pequeñas buscan su alimento. Entre los arbustos, pájaros casi sin voz saltan en silencio. En este mundo de niebla y lluvia, se nota poca o ninguna actividad de insectos, pero con unos momentos de sol, mariposas negras como Protopedaliodes kukenani comienzan a revolotear y grandes libélulas negras regresan, vuelan de un lado al otro por quebradas en busca de presas. Hay arañas tarántulas negras, ciempiés negros e insectos negros de todo tipo.
Melanismo. Muchos animales son melanísticos, de color marrón oscuro a negro; brindándoles protección contra la radiación ultravioleta, reduciendo la pérdida de agua por evaporación y brindándoles camuflaje contra la superficie oscura de la roca.
Anfíbios. McConnell y Quelch, en 1894, hicieron algunos descubrimientos interesantes, entre ellos una curiosa rana negra, Oreophrynella, un género endémico de los tepuyes. Oreophrynella es una especie antigua que ha conservado sus características primitivas porque el entorno de los tepuyes no la ha obligado a evolucionar radicalmente. Está más estrechamente relacionado con las ranas que se encuentran en África que en América del Sur, lo que sugiere que sus orígenes se remontan a Gondwanaland.
Protopedaliodes kukenani
Campilopterus hyperithrus
Nasua nasua
Oreophrynella quelchii
Hydrolutos breweri
Steatornis caripensis